miércoles, 3 de febrero de 2016
Por: Daniel Jasso
Memorables,
sin duda, son algunos de los nombres que han ido adornando de gloria el cuerpo
entero de un equipo con historia; el capítulo más importante de esta es lo que
forja a estos personajes, que muchas veces, el haz de destreza que presumen,
los presenta de manera concisa.
Es
extremadamente despectivo decidir quién ha destacado sobre el terreno puma y
quién no, sobre todo el porqué; por ello, trataremos de recordar y recalcar de
manera somera –no por ello escueta-, el perfil de tres jugadores que llevan la
garra por dentro.
Con
33 años de edad y procedente de Argentina, pero ya con el águila y la
serpiente tatuadas en alma y ser, así
como en papel, Daniel Emmanuel Ludueña, a quien le gritamos ‘Hachita’, debuta
en México con Tecos en el Apertura 2004, el éxito venía de familia, encontrado
también en su padre y hermano, también futbolistas profesionales.
Con
los Tecos de la UAG, jugó 70 partidos hasta su salida en 2007.
Tiempo
después de ingresar al Santos Laguna para el Clausura 2007, en el cual vivió en
carne propia el peligro de descenso y disfrutó el título de goleo justo por
debajo de otros significantes del mismo club, entre ellos Jared Borgetti, fue
fichado en calidad de trueque, por un breve periodo, por el Pachuca hasta su
debut con el Club Universidad Nacional, en el Clausura 2014, cabe destacar su
aprovechamiento portando el uniforme universitario hasta la fecha, sin duda ha
demostrado ser una pieza fundamental para el conjunto.
En 2015, el mediocampista llegó hasta la
final contra Tigres, los penales le cerraron el triunfo en el partido de
vuelta.
El
argentino Ariel Gerardo Nahuelpán, ya con 17 años cumplidos, debutaba en el
Club Atlético Nueva Chicago por allá del 2005, de ahí fue fichado por el Real
Racing Club de Santander, y, a raíz de eso, el delantero perteneció a varios
clubes de España antes de regresar a Latinoamérica para firmar en nuestro país
con los Pumas de la UNAM por una temporada, esto en 2013, para después fungir
como préstamo de regreso a Argentina por seis meses con el Club Atlético Tigre.
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| Vistiendo la camiseta dorada, Nahuelpán parecía llegar a hacer de Pumas su hogar permanente. |
Fue
en la temporada 2014/15, que el jugador ya naturalizado mexicano, regresa, pero
esta vez tras las filas del Pachuca, equipo con el que entrena actualmente y
con el que poco a poco va sobresaliendo, aunque a veces no por otra cosa sino
por su indisciplina, razón que le ha acarreado problemas con la directiva del
equipo, quienes lo han llegado a suspender.
Cerramos
con Diego de Buen, esta vez, un mediocampista completamente mexicano, nacido en
1991, logró que la gente lo fuera conociendo, inicialmente en Pumas, del cual
se sabe por él mismo en una declaración, pidió ser transferido para asegurar
minutos de juego, ya que supo que su estadía tras las paredes universitarias no
sería muy larga, Puebla fue quien abrió sus puertas, seguido del Pachuca y Xolos.
Debutando
en 2009 con Pumas, su primera oportunidad profesional y para hacer historia, De
Buen se sintió más atraído a la idea de congeniar con la Selección Nacional
para la Copa Mundial Sub-20 con sede en Colombia, teniendo poco después una
convocatoria con la selección mayor para la Copa América el mismo año.
Diego
perfiló con la Selección Sub-20 en 2011.
A la
fecha, logrando que griten su nombre, firma con el Santos Laguna para el
Clausura 2016. De Buen dice que comienza con el club con la intención de hacer
historia y tener continuidad.
A
pesar de haberse sentido muy acoplado, según sus propias palabras, el joven
seleccionado no pudo atenerse a la idea de jugar bajo la sombra de los
refuerzos de su temporada debutando en Ciudad Universitaria, aún así, considera
un sueño haber debutado en Primera División y siempre agradeció al equipo.
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