sábado, 29 de agosto de 2015
Por Brian Sales
Luego de imponerse por 3-4 al equipo de Santos, los Pumas durmieron y amanecieron como líderes parciales de la competencia. Sin embargo, en este duelo específicamente, los felinos dejaron muchas anotaciones en la agenda de las cuales tenemos que hablar.
De entrada, la defensa y el mal partido que pasaron los laterales es alarmante. Guillermo Vázquez tiene toda la confianza en Josecarlos Van Rankin, pero, realmente, el jugador que da más seguridad en esa zona se llama Marcelo Alatorre, quien estuvo en la banca durante todo el partido. En el otro costado, luis Fuentes, sencillamente, no tuvo una gran noche, como a las que ya nos tiene acostumbrados.
Adelante, y como no se había visto en otros años, los universitarios son sumamente contundentes. Fidel, Herrera, Britos y Sosa se ubican como la mejor ofensiva y están a sólo 3 goles de igualar la cantidad de tantos anotados por Pumas el pasado torneo. Sí, mientras siga la contundencia, por más mal que esté la defensa, los del Pedregal seguirán ganando y sumando, pero no gustando.
Lo que pondría como lo verdaderamente malo, sería el momento que pasó Gerardo Alcoba, luego del choque con el jugador de Santos y su abertura en la cabeza. Antes que cualquier institución o marcador, está la integridad de los jugadores, con lo que no se puede jugar. El cambio obligado de Alejandro Palacios y el hielo que recibió Fidel Martínez, luego de salir de cambio, alertaron a todo el pueblo azul y oro. Para su fortuna, el receso por Fecha FIFA podría hacer que ambos jugadores se recuperen para enfrentar a Veracruz.
Si Pumas logra encontrar un equilibrio en todas sus líneas, y mantener la contundencia, ya se puede soñar y pensar en alcanzar la Libertadores... ¡y la Liguilla! Hoy, Pumas gana y gusta a románticos del balompie, pero viene lo complicado: mejorar y mantenerse. Guillermo Vázquez lo hizo en el 2011; sabrá cómo hacerlo este semestre.
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