Por: Daniel Jasso
Momentos cruciales que definieron el
destino de un equipo.
Fue en el
Clausura 2006 cuando Dorados parecía sacar de lo más recóndito de su plantilla
el talento necesario para poder llegar a ser campeones de la liga, no obstante,
en el transcurso del torneo, su desempeño fue decayendo, hasta llegar al punto
final, el descenso.
San Luis no
desaprovechaba la oportunidad de predominar en marcador cuando se enfrentan,
aunado esto, el último partido del conjunto liderado por Juan Manuel Lillo,
contra Pumas, define el destino de los jugadores en el empate a ceros, siendo
derrotados mediante historial de puntaje y despidiéndose de la Primera División
por el momento.
Llevándose a
cabo el juego decisivo para los sinaloenses contra la los Pumas de la
Universidad, influía mucho el pasado a corto plazo, el récord de puntajes que
se venía arrastrando, de una u otra forma, dependían de la presencia que
hiciera Atlas sobre San Luis, lo cual
resultó en reversa y por tanto, decayeron.
El equipo de
Dorados tiene la fama mexicana de, por sobre otros conjuntos importantes, ser
el que más rápido ha logrado a Primera División, esto desde que el Club de
Sinaloa fue fundado en 2003. No obstante, esto no ha brindado la seguridad
necesaria que se necesita para siempre mantenerse en un lugar estable y sin
peligro de regresar a sus bases.
Será el
próximo sábado 13 de febrero cuando los que se enfrentaron a empate hace ya 10
años, recordarán, junto con la afición, lo que es pisar el Estadio Banorte. En
punto de las 21:00, los ánimos de ambas escuadras redefinirán la historia
local.
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